Una vez que estemos seguros de que queremos tener un perro deberiamos pensar la finalidad principal (ademas de la de compañia) a que sera destinado dicho animal. Los grupos cinológicos y las pautas de comportamiento de cada una de las razas nos orientaran en una primera aproximación respecto a dicha finalidad.
Ademas algo que se olvida con suma frecuencia en las consideraciones previas a la adquisión del cachorro es el espacio vital que va a tener en referencia a la raza de cánido elegida, con lo que con suma frecuencia se escoge la raza meramente por estética y moda sin pensar para nada en donde habitara o la necesidad de un espacio libre para la realización de ejercicio físico en función de la raza. Todos estos factores son importantes a tener en cuenta para conseguir un equilibrio de caracter y salud de nuestro amigo.
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